sábado, 7 de marzo de 2020

Ayuda

La soledad es una mierda. Una mierda que hiede más cuando te das cuenta de que realmente no estás solo, pero igual así te sientes.

Siempre he escuchado que los amigos son la familia que uno escoge, sobre todo dentro del colectivo LGBTQ+, al que orgullosamente pertenezco. Por eso es tan importante escoger a los amigos correctos. De mi familia de sangre solo tengo cerca a mi mamá, una mujer dura y cariñosa que ha hecho todo lo posible por entenderme y ayudarme. La amo y la aprecio por ello, pero no es suficiente... Y me frustra no entender por qué.

Me gusta mucho dar amor y cariño. Siempre lo hago sin esperar recibir amor y cariño de vuelta. Es como mi misión en este mundo, pero cada vez se hace más difícil. Estoy hambriento de afecto. Sediento de atención. Carente de empatía hacia mí. Y aunque mi mamá hace lo posible por proveerme de esas necesidades, sé que también lo hace porque es natural, porque soy su hijo. ¿Por qué no puedo recibir amor de alguien de manera espontánea fuera de mi entorno familiar? Esta pregunta me atormenta a diario, porque me cuestiono es a mí mismo, no a los demás: "¿soy difícil de amar? ¿Qué estoy haciendo mal? ¿Soy desechable? ¿Cuál es mi valor?". Cuestionamientos que a estas alturas no deberían ocupar tanto espacio en mi mente.

No voy a ahondar acá en las dificultades económicas consecuencia de vivir en un país difícil, una crisis profesional que ya lleva unos 5 años sin solucionarse y lo difícil que ha sido reunir dinero para terapia y no para comer. Por supuesto todo esto se apila para atentar constantemente contra mi salud mental. Pero igual si sirve de algo, solo quiero dejar esto ahí afuera: necesito ayuda. Necesito comprenderme mejor. Necesito entender por qué me siento así. Necesito afecto. Necesito entender por qué si me caigo bien, no soporto estar solo. Necesito saber por qué necesito compartir todo con alguien para sentirme bien.

Estoy exhausto y no quiero rendirme.